Recientemente, el conflicto en Yemen ha escalado con ataques continuos de los hutíes en el Mar Rojo, generando serias preocupaciones sobre la seguridad de las rutas marítimas en esta estratégica vía de comercio internacional. Uno de los incidentes más alarmantes ocurrió con el tanquero “Sounion”, que se encuentra en la mira de estos ataques, poniendo en riesgo no solo la embarcación, sino también la cadena de suministro global.

Los hutíes, un grupo rebelde yemení que ha estado en conflicto con el gobierno respaldado por Arabia Saudita, han intensificado sus operaciones en el Mar Rojo, utilizando drones y misiles para atacar buques mercantes. Estas acciones no solo afectan directamente la seguridad de las embarcaciones y su tripulación, sino que también generan una atmósfera de incertidumbre que repercute en el comercio internacional. El “Sounion”, que transporta productos petroquímicos, ha elevado las alarmas sobre el aumento de los costos de seguros y la posibilidad de retrasos en las entregas, lo cual podría tener efectos en cadena en los mercados globales.

El Mar Rojo es una de las rutas marítimas más importantes del mundo, actuando como un nexo entre Europa, Asia y África. Con más de 10% del comercio mundial transitando por estas aguas, los ataques hutíes representan una amenaza significativa para la estabilidad de los embarques y, por ende, para la economía global. Los precios de los fletes han comenzado a incrementarse como resultado de los riesgos elevados, lo que podría traducirse en un encarecimiento de productos en diversas regiones del planeta.

Además, la posibilidad de que naciones aliadas de los hutíes, como Irán, intensifiquen su apoyo militar a los rebeldes, plantea dudas sobre cómo esto podría transformar el conflicto y qué nuevas impuestas a la navegación podrían surgir. Esto a su vez podría motivar a algunas compañías a reconsiderar sus rutas marítimas, buscando alternativas más seguras que, independientemente de su costo, podrían resultar más viables a largo plazo.

Los efectos de estos incidentes no son solo marítimos. La incertidumbre que rodea la seguridad en el Mar Rojo está comenzando a tener un impacto más amplio en mercados financieros y en la economía regional, especialmente en aquellos países que dependen de la importación de petróleo y bienes a través de esta ruta. Las proyecciones económicas para el próximo año podrían verse afectadas si el conflicto no se resuelve y si los ataques continúan.